Los ojos son los responsables de aportar información visual al cerebro, quien interpreta y procesa la información. Es a través de la retina por donde la información llega al cerebro, para que éste atribuya factores tales como color, forma, etc. para ser devuelto al ojo.
La percepción visual, permite discriminar e interpretar los estímulos externos (lo que transmite la retina) para relacionarlo con conocimientos previos del individuo como también con el estado emocional del mismo. La retina sólo transmite efectos lumínicos, efectos ópticos que llegan desde el exterior. Esta recepción es denominada “visión”.
Sin embargo, el ojo no sólo es responsable de enviar la información al cerebro para su procesamiento visual, sino que permite que el cerebro procese la información con rapidez. Gracias a la información enviada por la retina, el cerebro es capaz de transformar esos efectos de luz y recrear la realidad externa… brindar significado a lo que los ojos transmiten.
Por ello, lo que el cerebro no comprende… el ojo no ve.